Buscar
¿Hacia dónde quieres ir?

¿Hacia dónde quieres ir?

Introducción

Viviendo el momento, tenemos la capacidad de ubicar la dirección que queremos llevar. Vivir es, desde mi punto de vista, tener metas, objetivos y sueños que hemos de cumplir desafiando todos y cada uno de los cambios y obstáculos que van surgiendo los cuales nos sirven para ayudarnos a ser mejores.

Para vivir hay que mejorar. Siempre tenemos algo nuevo que aprender. El desarrollo personal es una forma de pensar y ver la vida con otra perspectiva, tener otra visión. Si nosotros mejoramos, cambia todo a nuestro alrededor.

Todos en alguna o varias ocasiones de nuestra vida nos hemos sentido perdidos, sin saber qué camino elegir. Y justo cuando ya hemos ubicado la dirección a la que dirigirnos, ha ocurrido algo que ha complicado la situación y nos hemos perdido aún más.

Generalmente, siempre que nos enfrentamos a una nueva situación o a una toma de decisión, solemos sentir que flaqueamos y si miramos nuestra brújula, la veremos dando vueltas como loca, sin saber qué camino tomar. 

¿Qué hacer en ese caso? Seguir, insistir y nunca desistir. Piensa que cuantos más impedimentos y trabas te surjan, más valioso es aquello a lo que te estás dirigiendo. ¡Es muy buena señal! Todos y cada uno de los impedimentos que te surjan son pruebas que te pone la vida para evaluar si verdaderamente quieres “eso” o no. Si verdaderamente lo quieres lograr y superas todas esas pruebas, créeme, lo lograrás y tendrás una excelente recompensa. 

He aprendido que en la vida no existen cosas buenas o cosas malas. Son experiencias, yo las llamo pruebas. El universo, la vida, constantemente nos ponen pruebas que hemos de superar si verdaderamente queremos lograr aquello que nos hemos propuesto. 

La vida es para crecer y para crecer tenemos que aprender. Y solamente se aprende mediante la experiencias – positivas o negativas – , no sólo de las buenas se aprende, yo diría por mi propia experiencia que aprendemos más de las negativas. Todo nos enseña algo. Por eso es muy bueno que nos hagamos de “una caja de herramientas”, la llenemos de todos nuestros conocimientos, conductas, talentos, capacidades, habilidades…. Y proyectar nuestra vida hacia el crecimiento personal, sino nos quedaremos paralizados inmersos (de manera inconsciente) en el mundo de las quejas, lamentaciones, confrontaciones…

Por ese motivo, a día de hoy, cada vez que me ocurre algo “malo”, como ya el miedo no tiene poder sobre mí lo que hago es que echo mano de mi “gran caja de herramientas”, que siempre la tengo preparada para utilizarla en cualquier momento. NUNCA OLVIDES QUE TIENES TODO LO QUE NECESITAS PARA ENFRENTAR CUALQUIER CIRCUNSTANCIA.

Ten en cuenta que afrontar los problemas (pruebas) es imprescindible, por duros que sean o difíciles que parezcan. Es la única manera de adquirir experiencias. 

Para saber a dónde quieres ir debes tener en cuenta lo siguiente: 

¿Dónde estoy?

  • Conócete. Es muy importante porque cuando más te conozcas, más fuerza tendrás para afrontar cualquier cosa que te venga y podrás ver con más claridad el camino al que te quieras dirigir.
  • Tenemos la capacidad de poder cambiar nuestros pensamientos, en función de la realidad que queramos crear. 

¿Dónde quiero llegar? 

  • Sé optimista y positivo. Es la única manera de solucionar los problemas y reducir la angustia y el sufrimiento. 
  • Persigue tus sueños. Soñar es determinar quienes somos y quiénes queremos ser. Para que sea realidad debemos practicarlo diariamente y no dejar que sean solamente ilusiones. 

Y para conseguirlo, ¿qué hago? 

  • Para empezar, sal de tu zona de confort. La zona de confort es todo lo que nos rodea y a lo que nos hemos acostumbrado. Y por querer estar siempre ahí, nunca nos atrevemos a hacer nada “nuevo”, que nos sea interesante, ya que lo “nuevo es desconocido  y nos parece peligroso.” 
  • Aleja el miedo. El miedo te roba fuerza. Daña la mente, hace que ni siquiera tengas la capacidad de autovalorarte. No te deja pensar con claridad, ¿para qué lo quieres? ¡Aléjalo!
  • Motívate. Si estás motivado para hacer algo, ni el miedo ni nada te detendrá.
  • Haz frente a los cambios. Tu vida no está terminada, no “lo tienes todo hecho”. Al contrario, debes hacer tu vida y para ello has de tomar decisiones, aprender de las experiencias, hacer frente a los cambios. 

¿Cómo lo hago?

  • Nunca te rindas. El hecho de que hayas fracasado en alguna que otra ocasión no es motivo para rendirse. Inténtalo más veces, lo vas a conseguir!
  • No postergar. No hay motivo para retrasar algo. Si verdaderamente quieres avanzar, lo único y mejor que puedes hacer es no retrasar nada. Aunque se trate de algo negativo, no tiene sentido ir aplazándolo y dejarlo para después. Lo mejor es afrontarlo lo antes posible.
  • Rodéate de personas afines a ti. Con los mismos sueños y visiones.

Y recuerda que, si no sabes dónde vas puedes terminar en cualquier sitio.

“No hay camino favorable para el que no sabe a dónde va”

– Séneca –

Comenta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.